En esta obra, Aristóteles introduce el paradigma del "justo medio", como el ideal hacia donde debe orientarse el resultado de la acción humana. Y de este "justo medio" surge la medida del exceso y el defecto de dichas acciones. La ética, anbte todo, consiste en la acción. Por ello, el aprendizaje ético no depende del componente racional del alma, sino de las acciones que se llevan a cabo. La virtud y la justicia se aprenden practicando acciones virtuosas y justas, y no predicando sobre ellas.
La ética a Nicómaco constituye uno de los pilares fundamentales del pensamiento ético griego, al lado de las otras vertientes platónica y socrática, con las cuales Aristóteles destaca su posición crítica. La ética a Nicómaco se situa en una posición diferente respecto de las éticas abstencionistas como la estoica, y también respecto de las éticas hedonistas de la liberación del dseo y de los placeres, como también la proposición platónica de una ética en tanto ciencia que describiría los caracteres ideales y su relación con el bien supremo.